La digitalización en las cadenas de suministro y logística

La revolución industrial 4.0 ha obligado a la digitalización de las cadenas de suministro y logística. Aquellos negocios con la suficiente visión y pericia para prepararse y asumir el cambio han sobrevivido. En cambio, los ‘inadaptados’ a las nuevas normas de juego van quedando inexorablemente atrás.

La transformación de una cadena de suministro y logística, desde un 'modelo antiguo’ hacia uno digital, requiere una organización estricta. Es un gran esfuerzo a nivel humano, con la facilidad de requerir bajos costos operativos. La recompensa de lograr este cambio es la apertura hacia un negocio global, donde las posibilidades crecen exponencial y proporcionalmente con la capacidad del equipo de trabajo disponible.

Big Data, el inicio de la digitalización de las cadenas de suministro y logística

En los años 90, las cadenas de suministro y logística comenzaron su metamorfosis gracias a Internet. Un porcentaje corto de empresas priorizaron la digitalización, siendo capaces de tomar decisiones de arriesgadas de envergadura. A medio plazo, les facilitó apoderarse del mercado global digital. Después, la digitalización llegó a los hogares, a las personas y a los objetos (IoT, siglas en inglés de ‘Internet of Things’). 

Etapas para lograr una transformación exitosa en las cadenas de suministro

Básicamente, son siete fases que deben ejecutarse en paralelo. Alcanzar la meta de la digitalización en este sector demanda una disciplina estricta de los miembros involucrados en un equipo de trabajo. Todos necesariamente deben rendir al máximo en sus funciones asignadas. 

1. Crear un modelo de negocio automatizado 

El negocio digital se caracteriza por ser una oferta o un servicio altamente personalizado para el cliente. Además, debe ser flexible, integrado y coordinado en tiempo real con la cadena de abastecimiento completa. Debe tener capacidad para movilizar todos sus productos a cualquier parte, en cualquier momento, y también tiene que poder analizar un enorme caudal de información y datos. 

2. Desarrollar la analítica 

Para materializar las virtudes del Big Data, es necesario incrementar el volumen de información procesado. Esto pasa por implementar nuevas tecnologías que faciliten la planificación de la demanda, presentando los grupos de datos de forma estratificada y ordenada. En consecuencia, se podrán diseñar estrategias en base a la serie cronológica obtenida, específicas a cada 'target’. 

3. Evaluación proactiva de la tecnología

La evaluación proactiva de la tecnología exige una actualización permanente del software de servicios en base a las necesidades del mercado. Cada app o paquete informático que es lanzado debe evaluarse para conocer sus características. Generalmente, esto no implica mudar de tecnología inmediatamente. Sin embargo, el objetivo es estar listos para la evolución cuando una novedad significa mejoras. 

4. Explotar los beneficios de la automatización 

Valorar la automatización consiste en resaltar la disminución de costos operativos y la reducción de errores. Esto es producto de un trabajo constante, así como de evaluaciones frecuentes que permiten afinar la precisión de las respuestas ante las distintas vicisitudes que se presentan. Todo sea en pro del apuntalamiento de la cadena de suministro y logística. 

5. Alianzas comerciales y adaptabilidad 

La 'flexibilidad mental’ es una cualidad muy ventajosa para cualquier emprendedor o empresa. Existen muchos casos donde es muy conveniente la tercerización de una operación a través de un convenio de intercambio, bien sea de productos, tecnología o intelectual. En el mercado digital actual, poseer una red de proveedores es importante, pero tener una ‘red’ de colaboradores puede serlo aún más.

6. Integración de marketing y logística 

La era del Internet ha puesto una línea muy difusa entre el marketing y la logística. Los límites entre ambos conceptos son tan variantes que, por lo general, la logística forma parte de la propuesta de valor al cliente. En este sentido, se debe apuntar hacia procesos especializados en planificación de ventas y operaciones para mantener bien sincronizados todos los recursos y capital disponibles.

7. Conformar un equipo de trabajo comprometido 

El compromiso es el 'factor X’ al afrontar el reto de la digitalización. Todos los miembros de una organización, sin importar su rango, deben interiorizar la capacitación y la actualización constante como algo indispensable. Los líderes deben dar cabida a las iniciativas de todos los integrantes, para las evaluaciones es sumamente necesario la participación de todos.

Cada una de las observaciones e ideas surgidas en una evaluación merece ser escuchada. Cuando todos los elementos de un equipo de trabajo se sienten importantes, tienden a ser más eficientes. Un equipo de trabajo implicado es aquel con motivación perpetua hacia el mejoramiento personal y colectivo.