Los requisitos que se exigen en un máster online no discrepan demasiado a los solicitados en uno presencial, como veremos a continuación. Asimismo, es importante mencionar que los requerimientos varían de institución a institución y de máster a máster, por lo que para saber a ciencia cierta las barreras de entrada de tu programa de interés, te recomendamos visualizar los requisitos de acceso descritos en la ficha del máster o contactar directamente con la escuela.
Además de estas exigencias por parte de las universidades, en este artículo hemos querido ir más allá y añadir otros requerimientos que no son pedidos formalmente pero que consideramos altamente importante a la hora de estudiar un máster virtual.
El primer requisito esencial para acceder a una maestría online, tal como sucede con su contraparte física, es contar con un grado universitario, como una licenciatura o ingeniería. La nomenclatura de los títulos universitarios varía de país a país, pero se reconocen por ser aquellos que, una vez finalizados, habilitan el acceso hacia las maestrías.
Es frecuente que algunas instituciones soliciten experiencia laboral relevante a sus candidatos. “Relevante” indica que dicha experiencia ha de ser significativa para el máster en cuestión, es decir, es la que es adquirida dentro del mismo sector del postgrado.
Para el abordaje de una maestría en línea, el estudiante debe poseer principalmente un ordenador funcional y acceso a internet. Además de ello, tiene que entender el funcionamiento de las tecnologías básicas que se utilizan para el aprendizaje virtual, como el correo electrónico, programas de reuniones online (Skype, Zoom, Google Meet, Jitsi, etc.), y plataformas de e-learning (Moodle, Blackboard, Canvas LMS, etc.).
Ciertos másteres exigirán al estudiante la aprobación de un examen de admisión. Esta evaluación consiste en medir las competencias del estudiante para verificar si cuenta con el nivel necesario para cursar el máster.
Evidentemente, el estudiante debe ser capaz de cubrir los costos asociados de estudiar una maestría. No obstante, los másteres online por regla general son más baratos que los presenciales, esto es así debido a que las instituciones ahorran más dinero impartiendo formación a través de esta vía, lo cual se refleja en un precio final más bajo. Esta bajada de precio no tiene por qué repercutir en la calidad del programa.
Aunque la modalidad de estudio online permite compaginar con más facilidad la parte académica con otras responsabilidades, como la laboral y la personal, sigue siendo fundamental una buena organización para cumplir a tiempo con las tareas asignadas, asistir puntualmente a las videoconferencias, reservar horas de estudio, y dedicar algunos momentos para solventar dudas con los docentes.
Para aumentar la productividad a la hora de estudiar, realizar tareas académicas, y rendir exámenes con éxito; resulta elemental disponer de un espacio propicio para ello. Un buen lugar de estudio debe ser ordenado, silencioso, cómodo y agradable. Esto hará que el curso del máster sea más satisfactorio y más probable de ser finalizado en el tiempo estipulado.
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