By Blog de CEUPE on Miércoles, 21 Marzo 2018
Category: EMPRESAS

¿En qué consiste el análisis de inversiones?

La inversión es un proceso de acumulación de capital con la esperanza de obtener unos beneficios futuros.

La condición necesaria para realizar una inversión es la existencia de una demanda insatisfecha, mientras que la condición suficiente es que su rendimiento supere al coste de acometerla. Una inversión productiva consistirá en la adquisición de bienes con vocación productiva -activos productivos-, esto es, bienes cuya utilidad es la producción de otros bienes.


Cuando se procede a analizar un proyecto de inversión es necesario tener en cuenta una serie de variables importantes entre las que merecen destacarse las tres siguientes:

  1. El tamaño del proyecto

  2. El efecto sobre el riesgo económico

  3. El grado de dependencia

Las inversiones productivas pueden clasificarse en:

  1. Inversiones de mantenimiento

  2. Inversiones de reemplazamiento

  3. Inversiones de crecimiento

  4. Inversiones estratégicas

  5. Inversiones impuestas

Una inversión financiera supone la adquisición de activos financieros; la colocación de recursos en el mercado financiero en forma de acciones, obligaciones, cuentas financieras, etcétera.

Con frecuencia, la cantidad de recursos dedicados a una nueva inversión es tan elevada que la misma supervivencia de la empresa podría quedar amenazada por un proyecto fracasado.

Para que esto no ocurra, son tres los aspectos que debemos tener en cuenta:

  1. Liquidez

  2. Rentabilidad

  3. Riesgo

Para valorar cualquier proyecto, el elemento clave es el cash-flow o flujo de caja que genera. Entendemos por tal el valor neto que arroja la suma de las entradas y salidas de caja que genera el proyecto a lo largo de un período de tiempo determinado. Para valorar un proyecto, se utiliza el concepto financiero de flujo de tesorería en lugar del concepto contable de beneficio o pérdida, ya que se considera que el beneficio contable está afectado por una serie de normativas o reglas contables que no reflejan necesariamente la verdadera situación patrimonial de la empresa derivada del proyecto, en este caso, bajo el prisma de futuro y de planificación.

El cash-flow o flujo de caja de operaciones se calcula, por tanto, para todo el período de tiempo durante el cual el proyecto va a generar rentas. La base para calcular el cash-flow son los cobros y pagos generados por la inversión realizada, no ingresos y gastos.

No se puede olvidar a la hora de analizar una inversión las siguientes variables clave:

  1. Desembolso inicial

  2. Estimación del cash-flow

  3. Valor residual

  4. Tasa de descuento

  5. Riesgo de la inversión

El payback (periodo de recuperación de la inversión).

El plazo de recuperación simple es un método de valoración de proyectos de inversión de tipo estático debido a que no tiene en cuenta el momento del tiempo en el que vencen sus flujos de caja. Se define como el tiempo que se tarda en recuperar el desembolso inicial realizado en una inversión.

Las dos grandes limitaciones de este criterio son:

  1. La no consideración de todos los flujos de caja del proyecto.

  2. El no tener en cuenta el momento del horizonte temporal en el que tienen lugar los flujos de caja por lo que no opera con su valor actualizado.

Con objeto de paliar una de las limitaciones del método anterior surge el denominado plazo de recuperación descontado que es semejante al anterior salvo en lo que se refiere al vencimiento de los flujos de caja de la inversión que este método sí lo refleja en sus cálculos. Así pues, se trata de averiguar el tiempo mínimo en que se recupera el desembolso inicial de un proyecto de inversión y para ello iremos sumando los diversos flujos de caja actualizados hasta obtener la cifra de dicho desembolso inicial.

El Valor actual neto (VAN).

El valor actual o actualizado neto de una inversión o proyecto de inversión es igual al valor actualizado de todos los flujos de dinero esperados, es decir, es igual a la diferencia entre el valor actual de los cobros que genera y los pagos que origina.

Terminología importante:

  1. CFo: Desembolso inicial

  2. Ci: Cobros o flujos de entrada de caja que se esperan recibir al final de cada período

  3. Pi: Pagos o salidas de caja previstas al final de cada período

  4. CFi Flujo neto de caja de cada período (CFi = Ci – Pi)

  5. N: Duración u horizonte temporal del proyecto

  6. K: Tipo de descuento o coste de capital de la empresa

Lo que hace el VAN es traer al momento 0 los flujos de caja y teniendo en cuenta el Valor del Dinero en el tiempo tenemos que retrotraer los distintos flujos de caja al momento inicial n = 0 mediante el tipo de descuento K, i, o r.

El criterio del VAN propone que un proyecto de inversión sólo debe emprenderse si su VAN es mayor que cero.

  1. Si VAN > 0 se puede aceptar el proyecto (si bien dependerá de las otras alternativas)

  2. Si VAN < 0 se rechaza el proyecto (no hay que comparar con las otras alternativas)

Ventajas del VAN:

Inconvenientes del VAN:

TIR (Internal Rate of Return).

El TIR (Tasa Interna de Rendimiento) de una inversión la tasa de descuento que anula el VAN de la misma, es decir, que iguala el valor actual de los flujos de caja generados (CFi) al desembolso de la inversión (CFo).

El TIR mide la rentabilidad relativa anual bruta del proyecto de inversión sobre el capital que permanece invertido a principios de cada año. Esta rentabilidad incluye la retribución a los recursos financieros del capital invertido.

Por ser una medida de rentabilidad bruta, el TIR debe compararse con el coste de la financiación.

  1. Invertir: Si TIR > k

  2. Rechazar: Si TIR < k

Ventajas del TIR con respecto al VAN:

Inconvenientes del TIR:

Existe en Excel una función que permite calcular fácilmente el TIR y el VAN.

Inconsistencias del TIR:

Comparación de métodos (VAN – TIR):

Leave Comments