By Blog de CEUPE on Viernes, 07 Junio 2019
Category: TURISMO

Dirección y gestión de la empresa hotelera

“Un hotel es un edificio planificado y acondicionado para otorgar servicio de alojamiento a las personas y que permite a los visitantes sus desplazamientos.”

Generalidades del sector hotelero

Introducción

El movimiento de millones de personas que se desplazan abandonando sus lugares de residencia habitual, motivados por diversas causas, provoca a su vez la creación de establecimientos que oferten tanto el alojamiento como la manutención, bien sea por separado o conjuntamente. Este da lugar a gran número de empresas de alojamientos turísticos de distintos tipos.

Hay que recordar que las empresas dedicadas al alojamiento turístico han ido evolucionando a lo largo de la historia, ya que el turismo es un fenómeno “vivo”, en constante cambio al estar formado por personas turistas que van poniendo de moda las últimas aportaciones a la mayoría de la sociedad.

Las empresas dedicadas al servicio del turismo en relación con el alojamiento y la manutención pueden ser clasificadas por distintos parámetros según su punto de vista. No obstante, para definir de un modo generalizado el concepto de alojamiento turístico hay que tipificar a casi todos ellos y admitir las siguientes bases generales:

Empresas de alojamiento

El término alojamiento turístico es confuso, habiendo creado contradicciones y polémicas entre los profesionales cada vez que ha sido definido. Se han acuñado otros términos, tales como: empresas de hotelería, empresas de hostelería, establecimientos hosteleros, extrahoteleros, etc., con el fin de delimitar y diferenciar la variada oferta existente dedicada a albergar a personas.

Las normativas legales en su ámbito de aplicación nos han dado respuesta de cuáles son este tipo de empresas. Entre otras disposiciones tenemos:

Como puede observarse es difícil establecer una clara definición de alojamiento turístico. Sus características de naturaleza variable: los destinatarios, prestaciones, servicios, requisitos mínimos de infraestructura, etc., han obligado a diferenciar la variada oferta de lugares de pernoctación, pero siempre serán empresas que, con diferentes modalidades, prestaciones, clasificaciones, etc., se dedican a facilitar alojamiento.

Modalidades de alojamiento

Como ya se ha observado en el apartado precedente, los alojamientos turísticos son muy diversos, y admiten una amplia clasificación dependiendo de la variable deseada: normativa legal, ubicación, tipo de huéspedes, cantidad de habitaciones, régimen de explotación, propiedad, categoría, tiempo de funcionamiento, características específicas, etc.

Atendiendo a su denominación existen los siguientes tipos de alojamiento:

  1. Ocupar la totalidad de un edificio o parte del mismo completamente independizada, constituyendo sus dependencias un todo homogéneo, con entradas, ascensores y escaleras de uso exclusivo.
  2. Facilitar al público tanto el servicio de alojamiento como el de comidas, con sujeción o no al régimen de pensión completa, a elección del cliente, y con excepción de los hoteles-residencias.
  3. Disponer al menos de un 10 por ciento de habitaciones individuales”.

Finalmente, existen, según determinados servicios, modalidades de explotación e instalaciones complementarias, establecimientos hoteleros con la denominación o identificación de: temporada, playa, montaña, familiar, congresos, típico, aeropuerto, deportivo, casino, estaciones termales, y cualquier otra que se considere de interés, para lo cual tendrá que ser solicitada a la Administración.

Comentario especial merecen los Paradores, los cuales atienden a la filosofía de creación por parte del Estado de plazas hoteleras en lugares donde la iniciativa privada no lo hiciera, así como al aprovechamiento, cuando fuera posible, de monumentos antiguos.

Continuará...

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