FINANZAS

La contabilidad financiera: tipos, características y principios

En la empresa podemos distinguir, entre otras, dos áreas de gestión:

  1. Por un lado, el área que podríamos llamar económica o relacionada con el negocio que desarrolla y que abarcaría las actividades de producción, logística, inversiones, aprovisionamiento e incluso ventas y marketing.
  2. Y existe otro conjunto de funciones que se suelen llamar financieras y que permiten el funcionamiento correcto de las anteriores en tanto que casi todas ellas necesitan recursos financieros como contrapartida de los flujos de bienes o servicios que originan. Vender un producto o servicio implica cobrarlo y disponer de personal, de una fábrica u oficinas o comprar materias primas generan unos pagos o salidas de fondos.

“La contabilidad es el sistema que mide las actividades del negocio, procesa esa información convirtiéndola en informes y comunica estos hallazgos a los encargados de tomar las decisiones”.

“La contabilidad es el arte de interpretar, medir y describir la actividad económica”.

“La contabilidad es el lenguaje que utilizan los empresarios para poder medir y presentar los resultados obtenidos en el ejercicio económico, la situación financiera de las empresas, los cambios en la posición financiera y/o en el flujo de efectivo”.

Tipos de contabilidad

Se distinguen generalmente dos clases de contabilidad:

  1. Contabilidad general. También llamada externa o financiera, tiene como objetivo la presentación de la situación patrimonial de la empresa (a través del Balance) y el cálculo del resultado global (por medio de la cuenta de pérdidas y ganancias). La contabilidad general constituye un lenguaje común, comprensible en la comunidad de negocios y es la única que trasciende el ámbito de la empresa, puesto que existe obligatoriedad de presentarla de forma oficial.
  2. Contabilidad analítica. También llamada de costes o interna, sus objetivos son el cálculo de los costes y márgenes de los distintos productos, servicios y líneas de actividad, la valoración de los inventarios de producto terminado y en curso de fabricación, y la determinación de la rentabilidad de las distintas unidades organizativas o áreas de actividad. Tiene un ámbito exclusivamente interno de la empresa, no trasciende al exterior.

La contabilidad general y la contabilidad analítica no son dos sistemas alternativos, sino complementarios, y la utilización conjunta de ambas permite realizar los análisis económico-financieros precisos para ayudar en la toma de decisiones.

Existen también otros tipos de Contabilidad, como la de Sociedades, dedicada al registro de actos societarios específicos, como las fusiones de empresas, adquisiciones, liquidación de sociedades, etc.

Características básicas de la contabilidad

Los registros contables de una empresa deben reunir unas características básicas de rigor y seguir unas normas o criterios que son fijados por las autoridades o por colectivos de profesionales contables, las llamadas Normas de Contabilidad generalmente aceptadas.

Las características más importantes que tener la Contabilidad son las siguientes:

  1. Concepto de imagen fiel. La información contable debe mostrar la imagen fiel de la empresa
  2. Concepto de personalidad de la empresa. La empresa es una entidad autónoma, una unidad económica, cuyos asuntos están separados perfectamente de los de sus socios o propietarios y de los de cualquier otra empresa.
  3. Concepto de empresa en marcha o de gestión continuada. A menos que existan pruebas concluyentes de lo contrario, se supone que la empresa seguirá funcionando como tal y obteniendo un beneficio razonable durante un periodo de tiempo más largo que la vida de cualquiera de sus bienes. En consecuencia, la valoración del patrimonio empresarial debe realizarse aplicando las normas contables que sean aplicables y no buscando conocer el valor de liquidación de la empresa si ésta fuera a dejar de operar y vender todos sus activos.
  4. Concepto dinerario. La Contabilidad se expresa en términos monetarios. Para valorar las transacciones de la empresa de manera uniforme, es necesario disponer de una unidad de cambio y de medida que se denomina unidad monetaria (en España el euro).
  5. Concepto de periodicidad y beneficio. La vida de la empresa se divide en periodos relativamente cortos, y los cambios de riqueza se miden con arreglo a esas divisiones temporales, normalmente un año natural. Este principio viene a decir que el beneficio neto de la empresa no depende del movimiento de Tesorería, sino de los cambios experimentados por el patrimonio de los propietarios como consecuencia de las operaciones de la empresa.
  6. Concepto de dualidad o partida doble. Es un axioma básico en Contabilidad. La empresa cuenta con una serie de bienes y derechos que componen su activo. Por otro lado, la empresa se financia vía una serie de fuentes de financiación, tanto propias como ajenas, que son su pasivo y neto.

Principios contables

La contabilidad de la empresa se desarrollará aplicando obligatoriamente unos principios que en cada país o área suelen estar enunciados por las autoridades competentes en materia contable o bien por asociaciones profesionales.

Se indican, a continuación, algunos de los más comunes:

  1. Principio de prudencia. Únicamente se contabilizarán los beneficios realizados a la fecha de cierre del ejercicio. Los riesgos previsibles y las pérdidas eventuales con origen en el ejercicio o en otro anterior deberán contabilizarse tan pronto sean conocidas, distinguiéndose entre las reversibles o potenciales y las irreversibles o realizadas.
  2. Principio de empresa en funcionamiento. Se considerará que la gestión de la empresa tiene prácticamente una duración ilimitada, por lo que los principios contables no irán dirigidos a la valoración del patrimonio a efectos de su enajenación o liquidación, ya sea parcial o total. Esta idea ya se comentó antes en el concepto de empresa en marcha.
  3. Principio del registro. Los hechos económicos deben registrarse cuando nazcan los derechos u obligaciones que originen.
  4. Principio del precio de adquisición. Los bienes y derechos de la empresa se contabilizarán al precio de coste de producción o valor de adquisición.
  5. Principio del devengo. La imputación de ingresos y gastos deberá realizarse en función del flujo real de bienes y servicios en la empresa, con independencia del momento en que se produzcan los pagos o cobros.
  6. Principio de correlación de ingresos y gastos. El resultado del ejercicio estará constituido por los ingresos de dicho período menos los gastos realizados para la obtención de aquellos. Además, deberán considerarse los beneficios y pérdidas no relacionados directamente con la actividad de la empresa (atípicos).
  7. Principio de no compensación. En ningún caso podrán compensarse las partidas del activo y del pasivo del balance, ni las de ingresos y gastos de la cuenta de pérdidas y ganancias.
  8. Principio de uniformidad. Los criterios adoptados para la contabilización de los hechos económicos deberán mantenerse en el tiempo. Si se alterasen durante un ejercicio, esta situación debe reflejarse en la memoria del mismo, indicando la incidencia cualitativa y cuantitativa de la variación.
  9. Principio de importancia relativa. Podrá admitirse la aplicación no estricta de alguno de los principios contables si la importancia relativa en términos cuantitativos no sea relevante.