PSICOLOGÍA

¿En qué se basa el análisis curricular integrativo IM?

Una clase es una pequeña sociedad, un microcosmo, donde los estudiantes serán ciudadanos adultos en el futuro que tienen necesidades e intereses, opiniones dispares y motivaciones diversas. Con la motivación de favorecer nuestras actividades docentes, partiremos de nuestra inteligencia interpersonal e intrapersonal.

Cada miembro de la comunidad va comprendiendo mediante la interconexión que debe de modificar parte de su aptitud, habilidad o patrón para poder llegar a integrarse y referenciarse con el otro de manera más significativa. No deja de ser una forma de inteligencia cooperativa (interpersonal e intrapersonal) que subyace a todo proceso de culturización y adaptación.

Según nuestras aptitudes y motivaciones como docentes, y también las de nuestros estudiantes, podríamos catalogarnos en tres grandes grupos:

  1. Aspiración. Capacitación del individuo, grupo, tribu, comunidad u organización para dirigirse hacia un interés común.
  2. Capacidad para pensarnos y observar nuestro pensamiento mientras nos pensamos. Sobre este axioma profundo, el ser humano se construye como ser único.
  3. Capacidad de visibilizar sistemas, fuerzas y oportunidades que están en escena. Así somos capaces de observar aquellos asuntos que merecen ser puestos al descubierto, logrando una mayor cohesión grupal, compromiso por parte del grupo y desarrollando un nuevo abanico de capacidades como resiliencia, empatía o afectividad.

Al integrar las IM y las cinco mentes en nuestro currículum cotidiano, no solo estamos desarrollando nuevas aptitudes y habilidades, sino que estamos ajustándonos a los cambios permanentes imprescindibles en el siglo XXI. Trabajando en equipo, con nuestros colegas y otras instituciones, somos capaces de aprender de las innumerables historias, casos y prácticas que se están realizando. Los alumnos que eran considerados como no aptos, ahora se convierten en una fuente de observación y comprensión profunda.

Gestión analítica del currículo integrativo de las IM.

En el proceso evolutivo del currículum de las IM, tanto H. Gardner como D. Felman (2006) relacionaron dos tipos de situaciones interesantes en términos pedagógicos.

Se refieren a las experiencias:

  1. Hacen alusión a aquellas experiencias que marcan un sesgo positivo en nuestro cerebro, contribuyendo a la creación de un patrón relacional.
  2. Se refiere más a aquellas situaciones que no podemos gestionar (emocional, psicológicamente…) y que nos sitúan en un escenario de inmovilidad, indefensión o parálisis.

Algunos de los elementos que pueden llegar a promover, potenciar o retrasar el desarrollo de las inteligencias son:

  1. Disponibilidad de recursos, mentores o experiencias: si, debido a nuestro contexto, familia o situación en concreto, no tenemos el potencial de acceder a algo que resulta vital para la evolución de nuestra inteligencia, puede marcar el hecho de cómo hemos adquirido o no esa destreza.
  2. Contexto histórico-cultural o socioeconómico: Si no está socialmente aceptada, vuestras capacidades se verán mermadas o incluso desaparecerán.
  3. Contexto familiar o grupal: Todos ellos marcan que nosotros podamos acceder a contexto, mentores o experiencias que cristalizaran de una medida u otra nuestras destrezas futuras.
  4. Coyunturas situacionales: a veces la vida nos coloca en situaciones que no hemos escogido pero que pueden potenciar inteligencias de modo determinante.

El primer paso es presentar las evidencias sin imposición, como resultado del miso el alumno va ganando confianza y el profesor va conociendo nuevos modos de hacer. No es simplemente ganar la confianza del estudiante, es conquistar la nuestra propia. Encontraremos resistencias al cambio, mecanismos de sabotaje y patrones metacognitivos que no son tan fáciles de identificar.

Recoger el feedback al inicio y al final de la actividad, poner énfasis en la participación individual, grupal, parejas, grupos de tres, recoger conclusiones… son alguna de las dinámicas que permiten visibilizar no solo lo que se ha aprendido, también para qué sirve lo aprendido.

Cada docente utiliza claramente unas técnicas que tienen mucho que ver con sus inteligencias dominantes:

  1. Lingüísticas: escribir en la pizarra “silencio, por favor”.
  2. Musical: tocar las palmas, o un gong.
  3. Corporal: hacer el gesto de ponerse el dedo en los labios.
  4. Matemáticas: utilizar el reloj para contar cuánto tiempo se pierde o se gana y después anotarlo en la pizarra.
  5. Espacial: colocar la imagen de una clase en silencio y ponerlo en la pizarra.
  6. Interpersonal: susurrar al oído a un alumno “es hora de empezar” y hacer que este lo haga a otro, y así toda la clase.
  7. Intrapersonal: empezar explicando la lección y dejando que los alumnos se hagan responsables de su propia conducta.
  8. Naturalista: poner el sonido de un pájaro haciendo ruidos estridentes, o el rugido de un león.

Preparar los cambios en las actividades.

Sabemos que a los estudiantes les cuesta el cambio. Ya hemos conseguido que se interesen por una inteligencia o un centro de aprendizaje y les vamos a pedir que cambien, que roten. No será fácil.

Las estrategias de cambio de actividad también tienen que ver con el tipo de inteligencia dominante, por tanto, si quiero usar la inteligencia:

  1. Musical: puedo usar una música para el descanso, otra para la entrada a la clase, otra para la salida, otra para la comida…
  2. Espacial: puedo usar símbolos que impliquen que es hora de prepararse para un cambio de actividad. Imágenes de alumnos descansando, comiendo, saliendo hacia sus casas o tomando el autobús.
  3. Kinestésica y corporal: podemos recurrir a gestos o movimientos del cuerpo para indicar que se aproxima un cambio.
  4. Lógico-matemática: un gran reloj digital que marca las horas del cambio o usar el timbre del móvil con una melodía particular para marcar los ritmos.

Comunicar normas y leyes en la clase según las IM.

Estas son algunas de las sugerencias que H. Gardner recomienda para aplicar el enfoque de las IM al comunicar las normas o leyes en el aula:

  1. Se debaten las normas o leyes y el método más sencillo y conocido.
  2. Se asigna un número a cada norma y, cuando haya que citarla, se utiliza el número.
  3. Junto con las normas escritas, se añaden dibujos o símbolos gráficos de lo que está permitido y lo que no.
  4. Cada norma tiene un gesto o movimiento, así los estudiantes demuestran que conocen las reglas, repitiendo los diferentes gestos.
  5. Cada norma se asocia con una canción, una melodía o un sonido que todos conocen.
  6. A cada norma se le asigna un animal o símbolo, y también un atributo: jirafa feliz, águila callada... Los estudiantes pueden aprender las normas y crear vínculos a través del símbolo y la emoción que lleva consigo.

Estas estrategias de IM son básicas para hacer un análisis del currículo integrativo. Muchas veces no es que el currículo no esté bien programado, sino que no se respeta por los alumnos. Por tanto, tenemos que intentar hacer prevalecer el orden en el proceso disciplinado, con todas las IM.

Crear grupos de trabajo en el currículo de las IM.

Una de las aplicaciones estratégicas más interesantes de las IM lo constituye el hecho de cómo crear grupos reducidos de trabajo. La gestión grupal es un elemento clave en el éxito del aprendizaje.

Las IM trabajan proporcionando un gran espectro de estrategias para crear grupos basados en elementos secundarios relacionados con cada inteligencia.

Algunas de ellas son:

  1. Estrategia verbal
  2. Estrategia matemática
  3. Estrategia espacial
  4. Estrategia corporal
  5. Estrategia musical
  6. Estrategia naturalista

Permite explorar otras conexiones de inteligencias secundarias. Para empezar, prueba solo con dos estrategias y ves aumentando progresivamente cuando el alumno tenga más confianza en el método. Al final, comprenderá que tiene muchas cosas en común con sus compañeros.

Analizar el comportamiento individual en el currículo integrativo de las IM.

Aunque hayamos sido capaces de comunicar con eficacia las normas, y los modelos de las inteligencias, y de crear grupos de trabajo asertivos, siempre habrá algunos alumnos que no puedan seguir el programa; ya sea por sus características cognitivas particulares, porque tienen emociones internas no resueltas o porque están atravesando momentos particulares. Gardner hizo una reflexión muy interesante sobre el modelo disciplinario, adaptando los diferentes enfoques a los diferentes tipos de alumnos.

Algunos de los métodos de disciplina combinando las IM son métodos basados en:

  1. Inteligencia verbal
  2. Inteligencia matemática
  3. Inteligencia espacial
  4. Inteligencia corporal
  5. Inteligencia musical
  6. Inteligencia interpersonal
  7. Inteligencia intrapersonal
  8. Inteligencia naturalista

Las estrategias del comportamiento se pueden ajustar todavía más a las necesidades de alumnos con comportamientos más precisos, y la experiencia nos va indicando la utilidad de las IM.

¿Cómo adoptar una experiencia más amplia del análisis del currículum integrativo de las IM?

La teoría de las IM nos resulta muy valiosa porque otorga a los profesores un modelo para trabajar una cantidad de estrategias de la conducta, sistemas de disciplinas, pautas y competencias que permite probar una gran gama de intervenciones basándonos en las diferencias que los alumnos tienen.

Una sugerencia puede ser combinar las inteligencias que dominan con las que no dominan, o las inteligencias que dominan con las secundarias que están emergiendo. En otras ocasiones, para aquellos alumnos que sufren problemas de autoestima o falta de valor en sí mismos, es conveniente abordar y fortalecer las inteligencias que dominan. Hacerles fuertes y seguros en lo que son fuertes.

El análisis del currículum integrativo de las IM utiliza en conjunción: inteligencias, estrategias, competencias, gestión de la clase y técnicas de conducta basadas en las dinámicas de las cinco mentes (IM). La teoría de las IM puede influir e influye muchísimo en el resultado académico del estudiante. Considerando que, simplemente con la creación de un entorno que favorece la emergencia de las inteligencias ocultas y disolviendo las inteligencias reprimidas, podemos avanzar mucho.

Algunos ejercicios recomendados para fortalecer el análisis proactivo integrativo de las IM:

  • Selecciona una rutina, un problema o una conducta que suponga un reto para los alumnos grupalmente o para alguno individualmente. Experimenta con todas las inteligencias y observa cómo se modifica el evento seleccionado.
  • Prueba métodos no verbales, matemáticos o musicales (cualquiera que no sea el habitual) para llamar la atención, comunicarte o transmitir la información de clase a los alumnos. Observa qué pasa.
  • Elige a un estudiante que resulte especialmente difícil o haya sido catalogado como “problema”. Intenta observar que inteligencias secundarias u ocultas no están siendo trabajadas. A continuación, puedes seleccionar estrategias proactivas que podrían ayudarle a fortalecer su integración. Evalúa los resultados por comparación.
  • Revisa los sistemas en los cuales están apoyadas: conductas, normas, leyes o estrategias. Intenta modificarlo con tus compañeros desde una mirada diferente de las inteligencias. Puntos fuertes y débiles, etc.
  • Identifica cuáles serían las ventajas de fortalecer un análisis proactivo integrativo de las IM en el aula, en tu trabajo personal y en la vida académica de tus alumnos.